La chica perdida.
La chica perdida de los
te quieros olvidados, la que finge más que habla, y la que llora por muchas
sonrisas que permanezcan en su rostro. La chica de los andares independientes,
y del corazón irreparable. Anda sin darse cuenta de las cicatrices, y se olvida
de los que le hacen daño, aunque el dolor es el jefe de sus elecciones, no
suele temer a nada, ni a nadie, excepto a ella misma. Su debilidad escondida
tras un tejido de inocencia, y sus roturas cosidas por el primer sastre barato
que encontró.
La chica perdida, como
describirla sin echarse a llorar. Pierde más que gana, y realmente le da igual,
su vida construida sobre los cimientos de la perdición, acompañada de una frágil
soledad. La acompaña su buena amiga, la pequeña luna que la acoge cada vez que
un caballero de armadura oxidada la rompe aún más en pedazos.
Ella nunca se atrevería a
confesar los de pegamentos que ha tenido que utilizar en sus intentos de pegar
los diminutos trozos. Dicen que sus pupilas marrones hablan de alegría y
entusiasmo, pero yo sé que su sonrisa es la confesora de la tristeza que
derrama sus lágrimas invisibles. La suavidad de sus palabras y la ternura en la
que es capaz de describir lo perdido, provoca que cualquier corazón se encoja ante
su soledad. Nadie habla de sus sentimientos, y ella tan solo espera que estén perdidos
como lo está ella.
La chica perdida de los
mil vestidos, la que sin mascara de falsa felicidad, no podría caminar por este
mundo. Sus pies descalzos los cómplices de su locura, y sus manos heridas los
testigos del dolor mismo. Dicen que realmente no lo está, pero, ¿Qué sabrán
ellos? Ni siquiera se preguntan que hace cada noche cuando se va a buscar las
canciones que hablan de sus antiguas ilusiones.
Todo en ella perdida, y
ella aún más queriéndose perder. ¿Qué decirle para que se vuelva a encontrar? Es
la chica perdida que camina sin apenas darse cuenta del dolor que arrastra tras
sus pasos.
Encontrará un pegamento que funcione y reúna los pedazos, y el lápiz capaz de dibujar una sonrisa en su cara de las que no se pueden borrar.
ResponderEliminarAl final, se encontrará.
(Te leo)
Un beso!
<3
EMME
No me puedo creer que un blog tan fantástico tenga solo 106 seguidores... me esta encantando lo que leo, consigues transmitir grandes sentimientos sin describirlos como se suele hacer.
ResponderEliminarMe pasaré con frecuencia por aquí, besiños ^-^