Los 'Quédate' que se olvidaron con el paso del tiempo.

Tú siempre tan: "Quédate" y fuiste el primero en abrir la puerta, y perderte tras ella. Dejaste que el tiempo pasara, y convirtiese los sentimientos en cenizas imposibles de fumarse. 

Me quede sí, pero no a esperarte, o a dedicarte miles de versos para dejarte en el resquicio de la puerta. Me quede dándole caladas al incesante Tic-Tac, que quedo como banda sonora de este silencio. Me quede con el fin de conseguir que el Dolor pasara de mí, y decidiera por sí mismo, suicidarse entre la cama y el olvido. Pero no, en el mismo momento en que la cerradura dio su última vuelta, ya estaba acercándose sigilosamente, a mis ojeras revestidas de pura melancolía.

¿Cómo quererte sin que tenga que soltar lágrimas? O simplemente, ¿Cómo perderte sin que eso conlleve pasarme las noches en vela, buscando tu espalda entre mis sabanas? Porque te busco, me arranco el corazón cada vez que la luna adorna el cielo, con el fin de ignorar el sentimiento imparable de gritar al viento, ¿Dónde esta ese que me prometió amarme y no romper lo poco que quedaba de Roma?

Siguen mis músculos encogiéndose, cada vez que la ventana susurra una canción fría, que lleva tu nombre. Rebusco entre los cajones, y allí donde la oscuridad permanece, deposito los trozos uno a uno de mi corazón, como una especie de ritual, pretendiendo que el Dolor decidida abandonar esta casa en bancarrota.

Le coeur plein de toiles d'araigné et subsistent à base d'encre, qui fait revivre ce qui reste de moi. Alors sans vouloir te j'espère, avec l'espoir et le doleur, de la personne qui perd sa propre vie.