El eterno pasajero

Nos hemos quedado a un suspiro de creer,

Creer que toda puerta esconde un jardín maravilloso

Creer que toda inseguridad nos dará la fuerza suficiente.  

Hemos dibujado mariposas en la pared incorrecta. Le hemos cortado las alas a los cuervos inocentes y hemos bebido la sangre de la incertidumbre en el vaso del miedo. Nos hemos visto con los ojos cerrados y las dudas brotando en nuestra piel pero nos ha dado igual. El mismo sentimiento que nos produjo matar a las voces que nos advertía que el camino era más siniestro que placentero. 

Te he agarrado el brazo y he escuchado a tus monstruos sollozar. He sido la casa de un destino sin mi nombre y el abrazo de unos brazos que nunca llevaron tatuado mis besos. He bailado alrededor de ti, esperando que dejarás de mirar al pasado y te entrarán ganas de convertirme en tu futuro; pero nunca valió las cicatrices que me hice con tu nombre. 

Escribo sin sentido porque ya los sentimientos se marchitan con la huida del calor. Y el invierno se abre paso entre los pliegues de mi piel. Quiero detener la nieve en tu sonrisa y decirte que te quiero, que a veces cojeo de palabra y me hiero intencionadamente pero aún así te quiero.

Quería abrir el libro de la vida y ver siempre tus facciones en sus páginas, pero me contradeci y decidí acuchillar toda posibilidad alguna. Pido perdón si te miré a los ojos y pinté flores donde ahora nace el abandono: es mío pero se equivocó de destinatario.

Te he enviado doce cartas, pero todas han acabado en la basura como mi corazón. Nunca quise sentir, siempre quise fingir que lo hacía. El daño es mi miedo y si finjo que todo va bien, quién podrá hacerme gritar de dolor. 

Vencimos al amor y nos abrazamos a los recuerdos. Cantarte en susurros es solo para tranquilizar todo aquel desierto que he construido en ti. Nunca quise pero no pude evitar compartir aquella arena perdida con tus mejillas sonrosadas.

No me destierres de una tierra que no me pertenece, pero mátame de unos labios que nunca quisieron mis iniciales. Abrázate, acaríciate y acuchíllame.

 El daño es mi miedo y ahora que sigo fingiendo que estoy bien, nadie podrá hacerme daño.




Comentarios

Publicar un comentario

¡Cualquier opinión sera bien recibida, es más la agradezco!.
Espero que os guste. ^^

Entradas populares